Isla Mackinac, una ciudad sin autos en Estados Unidos

Isla Mackinac

Cuando alguien escucha por primera vez de la existencia de una ciudad sin autos, lo más probable es que piense que no le están hablando en serio, pero no es así, ya que en Estados Unidos, específicamente en el estado de Michigan, encontramos la única ciudad estadounidense donde viajar en auto está prohibido por la ley.

Remontándonos tiempo atrás, a finales del siglo XIX, antes de que los autos se volvieran tan "indispensables" como lo son hoy en día. El nuevo invento, los automóviles, eran considerados por muchos una maravilla de la mecánica (sin duda lo son) pero para la mente conservadora de aquel entonces, los carros eran máquinas ruidosas y molestas que alejaban la paz de la ciudad.

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En un principio varios lugares prohibieron (o por lo menos regularon) el uso de los automóviles por los motivos antes mencionados, pero con el paso del tiempo estas prohibiciones se eliminaron en todas las ciudades de Estados Unidos, excepto en una pequeña isla llamada Mackinac, ubicada en el lago Hurón del estado de Michigan.

Desde el 6 de julio del año 1898, el concilio de la Isla Mackinac estableció los siguiente: "El uso de carruajes sin caballos queda prohibido dentro de los límites de la aldea de Mackinac". Un dato curioso en esta ley, es que llaman a los automóviles "carruajes sin caballos". A continuación un video reportaje, lamentablemente no está en español pero sin duda vale la pena verlo.

La isla Mackinac solamente tiene 523 habitantes permanentes, pero en temporada de verano la población aumenta a cifras de hasta 15,000 personas debido a la gran afluencia de turistas que buscan en Mackinac una opción de alejarse del ruido de la ciudad; donde los carros van de un lado a otro.

A lo que prefieren andar en bicicleta junto a otras cientos de personas que también transitan en las carreteras libres de automóviles. Ver: Países que no necesitan visa para entrar a USA. Sin duda, la ausencia de carros es lo que ha terminado convirtiendo en un lugar único y especial a esta isla.

Tal y como dijimos, los turistas pueden alquilar bicicletas y conocer toda la isla en ellas, también pueden pasear por la carretera de 13 kilómetros que abarca la costa de la isla, mientras escuchan las olas golpear la orilla o simplemente disfrutar de un ambiente único en Estados Unidos.

Todo esto da una leve sensación a viajar en el tiempo y conocer un mundo donde el automóvil nunca se convirtió en el rey de la carretera. Sin duda es uno de los lugares a visitar en Michigan que no te puedes perder en tu viaje en familia.

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